Todo comenzó como una protesta por las "retenciones móviles" y el transcurso del tiempo, con una escalada de palabras y acciones, demostró que esa protesta escondía, en realidad, un enfrentamiento de parte de la sociedad, con el modelo de País propuesto (aunque no bién comunicado) por el Gobierno Nacional. Al fín de cuentas se trataba de dinero, "PODEROSO CABALLERO ES DON DINERO" decía en uno de sus versos Francisco Quevedo, poeta Español del siglo XVI. Se trataba entonces, de quien se llevaba la torta del crecimiento, si el mismo sector social que expolió al País desde siempre y que no quería perder su parte, o se distribuia con más equidad en toda la población. La clase media argentina, en general, vive en las "nubes de ubeda", como dijo el Senador Saadi (padre) en alguna oportunidad, cree que con la filosofía del derrame, si le va bién a la clase alta recibirán el beneficio que le permita mantener su "satus quo". Se olvida lo que demostró la realidad en el 2001 y quiere caer en la misma estupidez.
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